—Tenemos que escapar de aquí —fumó de su cigarrillo. Miró por la ventana, le temblaba la mano. No dirigía sus ojos a Lucas, solo observaba al caudillo nazi preparar a sus tropas. Soltó el humo, selló sus labios con fuerza—. Estamos muertos, judío. —Quién hubiera dicho…
—Me voy —dijo su padre. Él todavía no se había percatado de que estaba debajo de la mesa del comedor. Pero pronto miró hacia su dirección. Alex había movido ligeramente el mantel y eso le había delatado. Su padre fijó sus ojos en él y volvió a Mariana, su madre. —Haz lo que…