El Silencio de los Corderos



Obra conocidísima, más por la película que por el propio libro, trata la historia del asesino Lecter, casual en las novelas de Harris, y de una estudiante brillante llamada Clarice, que se ve inmiscuida en la investigación de un asesinato. La tarea de Clarice, en un principio, es la de analizar y evaluar psicológicamente al psicópata Lecter, poca gente cree en ella, pero conforme demuestra sus habilidades se ve participando en la caza del asesino de Buffalo Bill, el cual suele asesinar a mujeres para arrancarles la piel.

Lecter será un personaje vital en la obra, sin duda el lector esperará con ansia las conversaciones entre él y la protagonista. Lecter está en una cárcel de máxima seguridad, se le conoce como Hannibal el Canibal, en un pasado fue capturado por asesinar y comer carne humana. Clarice, por otra parte, se prepara para ser policía criminalista y es una de las mejores alumnas.

Otros personajes pasan por medio, siendo accionadores de muchas tramas y problemas, como la Senadora, Chilton, el Doctor de la cárcel de máxima seguridad donde yace Lecter, y Crawford, el jefe del caso de Buffalo Bill. Los personajes son algo simples, pero creíbles, si acaso Lecter es el mejor confeccionado y aun así los grandes psiquiatras del mundo no lo consideran un psicópata real. Clarice además es un personaje demasiado estereotipado, la mujer fuerte, mente genio que lo sabe todo, delicada pero dura, es la elegida para resolver el caso, que se note que las mujeres pueden. Y sin embargo la única razón por la que eligen a una mujer es porque sabían que Lecter quedaría seducido por ella nada más verla.

Otros clichés los vemos en la Senadora, por ejemplo, poderosa codiciosa que hace todo por salvar a su hija y no le importa a quien tenga que pisar o sobre quién tenga que pasar. Una estúpida que no debería de tener un cargo de semejante responsabilidad, ya que carece de objetividad. A pesar de que Clarice comenta que sus jugadas frente a Buffalo Bill son "inteligentes" considero que se sobrepasa. Es algo demasiado visto el hecho de un jefe de estado cegado por el poder sin más cambios que paso por encima de todo el mundo y soy un egoísta.

La codicia domina el relato, pero este (Spoiler grandísimo) es otro enorme antagonista de la obra: el Doctor Chilton, un doctor sin título que busca la fama a través de Lecter y, obviamente, robándole logros a la joven Clarice. De hecho, es él el culpable de muchas desgracias de la obra, pues saca a Lecter de la cárcel para que se escape, pensando que así la Senadora podría hacer un trato con él. ¿Con qué objetivo ayuda a Lecter? Por beneficio propio, evidentemente. Si él ayuda al caso y a la Senadora, él pasará sus días en una cárcel paraíso, con días de libertad vigilada; eso sí, Lecter debe dejar al Dr. Chilton ser su terapeuta único y principal. Su egoísmo caga todo el trabajo hecho por la policía.

Clichés, que vamos, Crawford, agente de policía al borde del retiro, súper inteligente, con una vida dramática, harto de la maldad del mundo, mujer al borde de la muerte, mucho drama. Perfecto en su trabajo, de personalidad fría...

La novela se introduce rápidamente, enseguida te interesas por la trama, pero la acción se desencadena por algunos puntos que lucen algo usados, el nudo de la historia es algo simplista, las causas no están del todo elaboradas y la obra tampoco es una obra maestra que digamos, es una novela policíaca bastante simple, pero con detalles lúcidos, como el personaje de Lecter, la relación entre él y Clarice, el simbolismo de la polilla "cabeza de la muerte", la inestabilidad mental de Buffalo Bill (la aclaración de que no es transexual, sino un desubicado en una sociedad que le rechaza).

Se agradece la documentación que hizo el autor, policíaca, criminalista, psiquiátrica, se agradece mucho el detalle de darle realismo a la historia, al menos para el ojo inexperto. Que para el experto quizá son todo bobadas. Está claro que es una novela y no todo es real, ya vemos en CSI que las pruebas de ADN no tardan un día, pero a ojos desconocidos queda bastante logrado. Estoy seguro de que esta obra incitó a muchos lectores a estudiar criminalística.


Vínculo Clarice-Lecter

Clarice es el vehículo que nos lleva a Lecter, Lecter es el mundo interior, la oscuridad, lo oculto, Clarice nos brinda algo de luz a esta incógnita, pues ella es la única que logra sacar palabras certeras de la boca de Lecter, al resto les miente por completo. La protagonista es una puerta abierta al mundo de Lecter, nos abre una parte de él como personaje, como persona más que como asesino, pero solo una parte de él, está claro.

La tensión entre ambos se nota desde el primer momento que se cruzan sus miradas, Lecter siente algo por esa chica y ella siente cierta atracción mezclada con miedo e inseguridad por ese asesino. Es un sentimiento muy humano, una atracción muy corriente, por aquello que está prohibido o que es malvado, por ello se dice que ellas los prefieren malotes. Pero, pensad por un momento: ¿con quién preferiríais tener una conversación, con Dios o con Satanás? Porque yo lo tengo claro.

También, Clarice no solo hace de vehículo entre el lector y Lecter, sino entre Lecter y el resto del mundo, en la realidad de la novela. Sin Clarice no hubieran podido obtener la evaluación psicológica que todos tanto ansiaban, no habían descubierto al asesino, pues Lecter le otorga muchas pistas a Clarice.

La investigación: como es Clarice

La novela nos va introduciendo poco a poco en la vida y el pasado de Clarice, una chica de campo que juega a ser una elegante mujer profesional, digna de ser policía. Ella misma se ve a si misma como una especie de fraude, no se merece el puesto, cree que su pasado estará ahí siempre. De hecho Lecter la analiza nada más verla en la primera visita y acierta en absolutamente todo. Niña de campo temerosa de la ciudad.

Por ello, Clarice trabaja el doble o incluso el triple, con una intensidad que no tiene ningún otro personaje. Su trabajo es exhaustivo e impecable, pero se empieza a convertir en personal cuando se topa con el cadáver de la joven Kimberly. Su propósito es salvarlas, a las víctimas, pero al hacer el examen forense a la víctima vemos una reflexión dada por el autor de forma muy sutil. Como la mujer era vista en esta clase de puestos por el resto de policías: como una mujer cita débil y delicada que no sabía hacer nada. Y Kimberly, sobre la mesa, con mil ojos de policías sobre ella, que desean verla desnuda y suplir su necesidad sádica de ver un cadáver diseccionado, mientras la sala está ajetreada y llena de voces. Clarice ya no comprende si el ajetreo es tanto por el cadáver como por ella, o mezcla de ambos, alza la voz y se llena de valor para echarlos a todos.

Lo importante es destacar que en la novela Clarice teme alzar la voz, teme HABLAR frente a aquellos hombres policía, que se creen superiores a ella, pero encuentra el valor para hacerlo, más que nada por Kimberly, que se merece un respeto. En la película parece que Clarice lo suelta sin pestañear.

Cuando todo se vuelve personal, Clarice deja de asistir a la academia, pues la importancia de salvar a personas reales es mayor que la de sacar notas. Le sabe mal, ya que ha luchado mucho por estar donde está, teniendo en cuenta su procedencia, pero cree que hace lo correcto. Y no se equivoca. Clarice es una mujer luchadora, un personaje que pasa de estar en la academia, con una paz irremediable, con una visión del mundo todavía inexperta, a meterse de lleno en el caos y la crueldad del ser humano. Y sabe cómo manejarlo.

La investigación se pone más seria cuando secuestran a la hija de la Senadora, la cual mueve cielo y tierra para salvar a su hija, pero que también entorpece la investigación haciendo tratos con Lecter. En esta novela los antagonistas no son los asesinos, son los compañeros, la gente que cae en sus redes como la Senadora, que está dispuesta a matar o a vender un país entero por salvar a su niña, es la codicia, (spoiler) que mueve a Chilton a desbaratar toda la investigación tan solo por fama, provocando más muertes. Y al principio puedes no esperarte que Chilton acabe siendo tan cabrón, pero desde el primer momento sabes que buena persona no es. Así que esto se trata de personas, pues Buffalo Bill es un demente, no está en control de si mismo, pero la gente de poder sí y el poder las corrompe, desean más, fama, dinero, sus deseos no pueden ser contrariados por nadie. Los monstruos no están en las cárceles, pues en esta trama todo hubiera sido una rápida investigación de un mes si no fuera por la intervención de la Senadora y Chiltón

Estos dos personajes se contraponen a Crawford y Clarice, que son la ética por excelencia. Hay como niveles, capas alegóricas de antagonistas:


Lecter: psicópata, asesino, caníbal, pero bienhechor de la protagonista, descartado por la tensión sexual entre ambos.

Buffalo Bill: enemigo perdonado, ya que es un loco enfermo, no se le puede odiar, esto lo deja claro el autor presentándonos a Jame Gumb (creo recordar) como un personaje más. Nos metemos en su vida, en su día a día, sus preocupaciones, sus traumas, sus miedos, su vida patética llena de tristeza por un deseo acérrimo de encontrarse. Focalizamos el narrador en él en un par de capítulos, nos muestra que es un personaje con muchos problemas interiores y pesadillas de su pasado. El autor quiere que le entendamos, porque son dementes, no enemigos. De la misma forma hace con Lecter, hace que nos atraiga, que nos encante, con su sabiduría.

Senadora: co-enemiga, cegada por su dolor, es una enemiga perdonada porque está consternada por la posible pérdida de su hija, pero ha obrado mal en el proceso.

Chilton: verdadero enemigo, es el que desencadena la acción de la tragedia. Él es el que se vende al mal, el que provoca desastres, muertes de inocentes tan solo por conseguir fama y dinero. Tanto lo desea que perjudica a una investigación policial y hace peligrar la vida de la hija de la senadora.


Predicciones del Oráculo

Normalmente en las novelas, y es lo que más me gusta, los personajes o el narrador dan pistas de lo que va a ocurrir, a veces son avisos al estilo Oráculo de Edipo, otras contradicciones como "seguro no pasa esto..." o "pasara lo contrario de lo que va a pasar", en el caso de esta obra tenemos a los personajes de Crawford y Clarice usando el papel de Oráculo. Es común en las novelas y no me desagrada en absoluto, prefiero aún más cuando los personajes contradicen el destino, queda más humano pensar que todo irá perfectamente cuando en realidad estás al borde del abismo.

Y es algo que pocos autores hacen, que el personaje mienta, me parece un punto muy interesante porque parece que pocos juegan con la contradicción humana, que todo lo que dice el protagonista debe ser verdad. Un personaje puede mentir inconscientemente hasta de si mismo, la mente esconde muchas puertas.


  1. Clarice nos predice que Lecter sabe sobre Buffalo Bill.
  2. Crawford predice que entre Lecter y Clarice habrá algo más que una relación profesional. Lecter se meterá en la mente de Clarice, al principio pordiversión, pero pronto las cosas cambiaran de cariz. 
  3. "No le digas nada personal", "No quieres al doctor lecter manipular tu cabeza" principio del libro, y estaba claro que esto era precisamente lo que iba a ocurrir.
  4. Chilton se presenta como el némesis desde su aparición. Clarice le mira mal, piensa mal de él, es un verde, un pervertido... Chilton no tarda en darle la espalda a Clarice, no la ayuda ni le aconseja antes de entrar a entrevistar a Lecter, ya que se niega a tener una cita con él. Este es un aviso claro de que Chilton es un enemigo en potencia.



Conclusión

El autor repite muchas cosas, palabras especialmente, frases, a veces en las mismas páginas. No me puedo creer que sea intencionado, pero muchas veces llega a cansar la reiteración. Verbos que se repiten como hallar, mismo vocabulario sin existencia alguna de sinónimos. Vocabulario pobre, algo básico, llega lo justo para el nivel de la obra. El autor cuando descubre una frase que le gusta no le importa prostituirla hasta que pierde el gusto, como el caso de "mil respiraciones" y su repetición de casi más de cinco veces en dos páginas. Detalles de principiante, como repetir el final y el principio de dos párrafos conectados, ejemplo:

Clarice se dio una prolongada ducha (párrafo 1, continua narrando).
(Comienza el párrafo 2) Tras su prolongado periodo de ducha...

Un despropósito, parece que ni el corrector se dio cuenta de estas cagadas, ¿no? O quizá en aquellos tiempos no eran tan exigentes con la calidad de la sobras literarias. Este error aparece en muchas ocasiones durante el libro, no es algo puntual.

Por otra parte, el drama de Crawford con su mujer medio muerta Bella me sobra mucho, no es importante ni me dice nada, no aporta absolutamente nada a la novela salvo la personalidad lúgubre de Crawford y si acaso el cliché de vaya puta mierda de vida tiene el jefe de policía. Me parece que la película logró plasmar algunos puntos MEJOR que el propio autor del libro, y eso sí que da mucha pena.


En la película, Clarice era más débil, llora después de ver a Lecter, no es capaz de hacer el examen al cadáver... se ve que la dulcificaron demasiado, no se ve el carácter decidido, capaz y fuerte de la Clarice de la novela, se ve más a una niñita que es ayudada por todos. En el caso del libro, es ella la heroína. Hay ciertos puntos muy distintos, como el caso de Roden y Pilcher, o cuando la hija de la senadora grita al ver una uña y Buffalo Bill grita también (no entendí esa parte ni porque la reacción). El hecho de que en la película Buffalo Bill llegue a sentir compasión por ella es una cagada, pero en fin, filme bien llevado. En algunos puntos supera al libro, como dije, sobre todo en el tratamiento de la entrevista de Lecter por parte de Clarice, la tensión y suavidad del momento.

Considero que esta es una buena obra, pero nada del otro mundo, solo para entretenerse. Los errores del autor y los clichés me obligan, normalmente, a odiar las obras que las contienen, pero en este caso la historia está tan bien llevada que se te llega a olvidar. Recomendada, tanto el libro como la película.


Que sepa el lector que este autor, Harris, escribió más novelas con el personaje de Lecter en ellas, si quiere continuar aquí les dejo sus novelas con la cronología correcta de su lectura, aunque siempre se sabe que los mejores libros, aun siendo sagas, no necesitan desesperadamente de antiguas lecturas para ser comprendidas:


  1. El dragón rojo (Red Dragon, 1981)
  2. El silencio de los corderos / El silencio de los inocentes (The Silence of the Lambs, 1988) 
  3. Hannibal (Hannibal, 1999) 
  4. Hannibal: El origen del mal

Publicar un comentario

0 Comentarios